Stonehenge

Escondido entre el océano Atlántico y la bahía de Arcachon, a Cap Ferret se le suele llamar el “Hamptons francés”. Pero ese apodo apenas araña la superficie. A diferencia de sus primos de la ostentosa Costa Azul, Cap Ferret es un lugar donde el lujo es tranquilo, la naturaleza es la reina y el tiempo se ralentiza en una brisa perfumada de pinos.

Cuando los viajeros piensan en las islas griegas, suelen imaginarse los acantilados encalados de Santorini o las playas de fiesta de Mykonos. Pero Lesbos, escondida en el noreste del mar Egeo, es un lugar donde el mito y la realidad se mezclan bajo los olivos y las historias antiguas resuenan en sus tranquilos pueblos.

En un mundo obsesionado con la velocidad, viajar despacio es un acto radical. No se trata sólo de tomarse su tiempo, sino de transformar la forma en que experimenta un lugar. Cerdeña, y en particular su capital, Cagliari, ofrecen una clase magistral de esta filosofía. Con su estilo de vida de Zona Azul, sus ritmos mediterráneos y su encanto atemporal, Cagliari invita a los viajeros a detenerse, respirar y conectar.

La caldera de Santorini es una media luna de acantilados de obsidiana enamorados de la luz. Pero también es un laboratorio para el futuro del turismo, donde Grecia está probando tasas, límites y una gestión más inteligente de las multitudes para mantener una isla frágil, a la vez habitable y mágica. Si está pensando en visitar Santorini en 2025, este artículo le mostrará exactamente cómo sortear las nuevas normas, evitar las colas y encontrar sus propios rincones tranquilos de azul y blanco.

Hay un momento en la Laguna Azul en el que el vapor se disipa y el campo de lava se revela: negro, lunar, silencioso salvo por el viento. En 2025, ese silencio adquiere un nuevo significado. Se trata de un balneario en medio de una península volcánica activa, protegido por nuevas barreras y control de gases en tiempo real, abierto entre erupciones y, milagrosamente, uno de los lugares más reparadores de la Tierra.